Salir de viaje y pasar unos días fuera de casa es
relajante, un placer muy recomendable. Pero desconocer qué hay que llevar, cómo
comportarse o a qué zonas es desaconsejable acudir puede acarrear más de un
problema en el lugar de destino. Si se sigue una serie de consejos para evitar
errores, la estancia en un país extranjero resultará de lo más placentera. A
continuación os damos algunas pautas que pueden ayudaros a disfrutar plenamente
de un viaje.
Los viajes de españoles al extranjero aumentan.
Para que la salida turística no se convierta en una pesadilla, se pueden seguir
las siguientes recomendaciones, algunas dictadas desde la Comisión Europea o el
Ministerio de Asuntos Exteriores y Cooperación.
1. Informarse antes de viajar al extranjero
Antes de viajar a otro país hay que informarse
sobre el mismo lo máximo posible. Además de consultar guías y tratar de conocer
a fondo el lugar, conviene leer y tener en cuenta las Recomendaciones de Viaje,
una información actualizada que brinda el Ministerio de Asuntos Exteriores y
Cooperación. En ellas se indican los requisitos para la entrada a cada país, la
documentación y los visados necesarios para viajar, las condiciones de
seguridad, la situación sanitaria, vacunas, divisas y los principales teléfonos
de interés.
Conviene contratar siempre el viaje con una agencia
de viajes especializada y de contrastada experiencia. Los viajes contratados a
través de internet no facilitan la información adecuada y muchas veces no es
correcta. Además, en el caso de surgir algún contratiempo antes del viaje, o
peor, durante el mismo, no suelen dar ningún amparo o prestar ayuda a los
clientes.
2. Estar localizable
Es conveniente dejar a los familiares o allegados
la dirección y teléfono de los hoteles en los que se hace noche, por si
tuvieran necesidad de localizar al viajero.
No está de más tampoco inscribirse en el Registro
de viajeros para que las autoridades españolas puedan localizar a la persona o
contactar con ella en caso de emergencia grave (desastre natural, conflicto
armado, etc).
Al hacer una reserva en una agencia de viajes deberá
de informar a la misma a las personas a las que autoriza dar información.
Recuerde que la agencia de viajes se debe a una relación de confidencialidad
cliente/agencia que no le permite dar información a terceros salvo que exista
autorización previa del cliente.
3. Viajar con la documentación necesaria y al día
Antes de salir de casa, se debe saber con precisión
qué documentación oficial se necesitará en los lugares que se visita. En la
Unión Europea basta con el Documento Nacional de Identidad, pero el documento
básico de viaje es el pasaporte. Hay que tener en cuenta que algunos países
exigen visado. Para obtenerlo se debe acudir al Consulado o Sección Consular de
la Embajada del país de destino en España.
Son trámites que pueden llevar un tiempo y exigir
documentación complementaria; por ello, conviene solicitarlo con bastante
antelación.
Una buena agencia de viajes le asesora y ayudará
con los trámites ahorrándole una buena cantidad de tiempo y dinero.
4. ¿Cuánto dinero se puede llevar en efectivo?
Para viajar por Europa hay un límite de dinero que
puede llevarse en efectivo. Así lo indica la Comisión Europea en sus recomendaciones,
en las que señala que la cantidad no puede superar o igualar los 10.000 euros.
Si la supera, hay que declararlo ante las autoridades aduaneras.
ES muy recomendable viajar con una o varias
tarjetas de crédito , tomando la precaución de gestionar con su banco el límite
de gasto mensual.
No olvide de llevar los contactos a los que
recurrir en caso de querer anular una tarjeta debido a un robo o extravío.
5. Respetar la ley y costumbres locales
A un viajero se le presupone respeto hacia el lugar
que visita. Pero nunca está de más recordar que bajo ningún concepto se deben
realizar actos que puedan suponer una ofensa a las costumbres, símbolos, autoridades
o leyes locales. Conviene saber qué acciones legales en España pueden ser
ilegales y conllevar multas de envergadura o incluso penas de cárcel en otros
países. Se debe tener especial sensibilidad en lo referente a las creencias
religiosas.
Es muy importante tener en cuenta que hay lugares
en los que no se distingue entre tráfico y consumo de drogas y que estos
delitos pueden castigarse con cadena perpetua o pena de muerte. Además, en
algunos países se considera droga a algunas sustancias de uso legal en España,
incluidos el alcohol o algunos medicamentos. También puede ser delito el
tráfico de bienes artísticos, históricos o arqueológicos, así como algunos
productos de origen animal o vegetal, por lo que todo lo que se adquiera ha de
ser legal y tener permiso de exportación.
6. Al hacer la maleta, no hay que olvidar la salud
¿Una emergencia? ¡Todo debe estar previsto! Al
viajar al extranjero es fundamental tener cobertura, además de conocer a quién
o dónde acudir cuando se sufre un percance:
En Europa se tiene derecho a la asistencia
sanitaria, siempre que se lleve la Tarjeta Sanitaria Europea(TSE), que expide
de manera gratuita la Seguridad Social. Si se necesita una ambulancia, o avisar
a los bomberos, policía, etc. se debe marcar el 112, un número de teléfono
gratuito en toda la UE.
Se debe viajar con un seguro médico que tenga plena
cobertura en caso de enfermedad o accidente durante el viaje, incluida la
evacuación en avión medicalizado. Los gastos de hospitalización y tratamiento
médico son asumidos por el paciente y suelen ser muy altos.
Si se es alérgico o se padece alguna otra
enfermedad que obligue a llevar medicación, hay que transportarla en el
equipaje de mano dentro de sus envases originales con las etiquetas visibles.
Es muy conveniente llevar el nombre y datos de contacto del médico y toda la
información sobre el tratamiento y las dosis prescritas.
Si la medicación necesaria incluye jeringuillas, se
debe contar con un informe del médico certificando esta necesidad. Y hay que
aportar, además, un certificado de la Agencia Española de Medicamentos y
Productos Sanitarios, en caso de viajar con fármacos psicotrópicos o estupefacientes.
7. Acudir a la embajada, si se sufre algún
contratiempo grave
Los problemas más comunes en el extranjero son la
pérdida o sustracción de la documentación, que pueden expedirse de nuevo, en
horario de oficina, en embajadas y consulados.
Un problema de mayor calado es ser detenido. En ese
caso, se debe pedir de inmediato a las autoridades locales que se pongan en
contacto con el cónsul de España. Y en caso de ser víctima de una catástrofe
natural o un acto violento, hay que acudir a la embajada o consulado españoles
en el lugar de destino o contactar con la Unidad de Emergencia Consular
(teléfono 913948900, en horario de oficina). Fuera de este horario, se puede
llamar al Ministerio en el teléfono 913799700 para situaciones graves.